Reconocimiento a la Peña Flamenca ‘Los Cernícalos’ por sus 50 años de historia

Una vez finalizado el espectáculo principal del primer Encuentro Provincial de Peñas Flamencas de Cádiz en el picadero de la Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre, y antes de pasar a las instalaciones del Museo del Enganche donde iba a tener lugar una multitudinaria convivencia, la junta directiva de la Federación Provincial de Peñas Flamenca de Cádiz quiso tener un especial recuerdo para con la Peña Flamenca ‘Los Cernícalos’, en reconocimiento a los 50 años de historia que atesora a sus espaldas como la entidad decana de este tipo en la provincia de Cádiz y la tercera más antigua de Andalucía.

“A Los Cernícalos no les ha gustado el flamenco, les ha dolido el flamenco y, por eso, desde su fundación en aquel bar del Parque del Retiro, los miembros de la peña han fraguado una historia más humana que flamenca” comenzó exponiendo José María Castaño, maestro de ceremonias de la jornada, los momentos previos a la entrega del galardón que reconocía los 50 años de historia que atesora sobre sus espaldas la tercera entidad flamenca más antigua de Andalucía y la decana de las peñas flamencas de Cádiz, en presencia de Nicolás Sosa, presidente de la federación gaditana, y de Juan Marín, vicepresidente de la Junta de Andalucía, presente también en el evento.

Para José María Castaño, la historia de la Peña Flamenca ‘Los Cernícalos’ ha sido “más humana que flamenca, sobre todo impulsando con sus propios medios las carreras de muchos a quienes llevaban en sus propios vehículos a los distintos concursos, o bien creando ellos mismos importantes concursos como el de saetas o el de guitarra”, este último de relevancia no sólo nacional sino internacional.

Tras recibir Pepe Alba, presidente de la Peña Flamenca los Cernícalos de manos de Juan Marín y de Nicolás Sosa el galardón que hacía efectivo el reconocimiento de la efemérides, el máximo dirigente de la entidad hizo hincapié en sus palabras de agradecimiento en que en la entidad “ha sabido mantener la línea original, marcada por nuestra asociación, no es tarea fácil y más aún con esta fatídica crisis que parece querer ahora cualquier proyecto que se quiera desarrollar y hasta nosotros hemos tenido que aparcar algunos de ellos”.

“Es deber nuestro divulgar el flamenco” reconocía Alba, quien aprovechó la ocasión para reivindicar que “es deber de las autoridades ayudarnos a dar conocer esta disciplina tan nuestra”.