Apuesta con positiva contestación. El primer festival Flamenco Jerez Gran Reserva con honores al siempre recordado Moraito ha supuesto un paso importante para seguir cultivando el mejor ambiente flamenco en la tierra jerezana. La inquietud por el arte y la decidida polivalencia empresarial de José Luis Lara desde su residencia algecireña se ha decidido a trasladar su valiente riesgo a su tierra de origen. Digno ejemplo a seguir. Sus dotes de creatividad renuevan ánimos en un sitio como Jerez tan especial y genuino donde se conoce y gusta de verdad la pureza y el arte.
Aquí la nota preocupante es que si la estimación de asistencia sobre cuatro mil personas logro cubrir los objetivos económicos del festival. Es muy fácil magnificar opiniones apoyándose en la pólvora ajena del bolsillo del empresario. Solo José Luis Lara al que hay que felicitar por su arriesgada apuesta sabrá si merece la pena dar continuidad a tan magnifico espectáculo como el que nos trajo en la noche del sábado a la plaza de toros de Jerez.
La presentación del festival la compartieron ágilmente José María Castaño y Juan Garrido.
Buen planteamiento de elenco artístico contando con el asesoramiento de Rafael Agarrado. Por delante todos los ingredientes eficaces de organización con predominio de un gran despliegue de seguridad en el espectáculo. Noche de agradable temperatura. A medida que transcurrían las horas se humedecía el ambiente. Lo único negativo fue las más de sus seis horas y media de duración. Algunos artistas excedieron su presencia en el escenario. Hubo uno que se distinguió por sus conocimientos en la medida del tiempo. Fue el veterano cantaor gaditano Juan Villar quien tras hacer con gran entrega sus tres cantes por solea, tangos y bulerías muy bien acompañado por la guitarra de Periquín Carrasco “Niño Jera” advirtió del paso a otros compañeros.
Rafael del Zambo, Manuel de la Nina y Enrique Remache abrieron la noche con el aire joven de artistas que constituyen el futuro acompañados por la guitarra de Pepe del Morao y del grupo de palmeros que tuvieron intensa actividad toda la noche con excelentes compas en todas sus intervenciones.
Existió una amplia nómina de jóvenes cantaores como de Felipa del Moreno, admirable en su poderío, David Carpio, Rancapino Chico y Antonio Reyes, que rompieron moldes con sus estilos diferentes. Llamo poderosamente la atención como el joven Rancapino canto para acompañar a la genial bailaora Manuela Carrasco, primera e indiscutible figura en su género. Ahí no quedo la actuación de Rancapino que volvió a hacerlo en solitario con la compañía de un excelente guitarrista como Miguel Salado, embrujado su toque como el mejor tono flamenquísimo jerezano y que ya lo había presentado en su acompañamiento a Pansequito, veterano y excelente artista con un timbre de voz personal y de gran arraigo en el más puro cante gitano.
Muy emotiva la presencia Remedios Amaya, quien enalteció su feliz reaparición como artista-superada su enfermedad- al pisar el escenario jerezano. Hubo momentos que calaron profundamente en el público. La guitarra de Diego del Morao, quien tuvo diversas y felices apariciones durante la noche hizo más acompasada la actuación de Remedios.
Tomasa La Macanita, deleito con fuerza y arte su actuación que la inicio con los tientos que nos hicieron recordar a la genial Paquera de Jerez…La Macanita lleno el escenario con su extraordinaria personalidad bien acompasada por la guitarra de Manuel Valencia, otro excelente profesional de la sonanta que también tuvo intensa actividad durante toda la noche. Breve pero muy pura la actuación de Juana la del Pipa. Muy avanzada la madrugada Capullo de Jerez, que atraviesa un momento muy álgido en su trayectoria, como siempre tuvo un espectacular cierre con su actuación.
Xerezmania Producciones S.L. ha sido beneficiaria del Fondo Europeo de Desarrollo Regional cuyo Objetivo es mejorar el uso y la calidad de las tecnologías de la información y de las comunicaciones y el acceso a las mismas y gracias al que ha implementado: Desarrollo de app móvil para la mejora de competitividad y productividad de la empresa. Esta acción ha tenido lugar durante 2018. Para ello ha contado con el apoyo del programa TICCámaras de la Cámara de Comercio de Jerez