Mercedes Ruiz engrandece con su baile la obra ‘Tauromagia’ de Manolo Sanlúcar

Mercedes Ruiz ha asumido el difícil reto de coreografiar ‘Tauromagia’, una de las grandes obras que grabara el guitarrista Manolo Sanlúcar hace ahora 30 años y donde, sin duda, dejó indudables muestras de su maestría. Su “música perfecta”, en palabras de la bailaora jerezana, se engrandece ahora con un espectáculo que acogerá el Teatro Villamarta mañana sábado día 2 de marzo, dentro del XXIII Festival de Jerez. Sobre este escenario la danza flamenca y española se relacionará con el mundo del toro.

En ‘Tauromagia. Coreografía para la obra de Manolo Sanlúcar’ aparecen los nueve temas que forman parte del disco del guitarrista. Los interpreta Mercedes Ruiz junto a la bailarina de danza española Ana Agraz y un cuerpo de baile compuesto por Beatriz Santiago, Aurora Caraballo y Vanesa Reyes. “Somos toro y toreros en distintos momentos porque cada tema es diferente. Bailamos danza española y flamenca, utilizamos las castañuelas y todos nuestros recursos a nuestro alcance para dar un sentido unitaria a la obra”. “Todo tiene un sentido, una lógica. Nada es gratuito”, añadió la bailaora.

Dado que la obra musical duraba unos 40 minutos, se han añadido algunas partes tras consultarlo con Manolo Sanlúcar para que pueda tener una duración propia de un espectáculo. Estos elementos ajenos al disco original son tres sonetos de Miguel Hernández (poeta favorito del guitarrista), pero sólo con voz. “Lo que no queríamos era incluir temas de otros discos” para que siguiera siendo ‘Tauromagia’, explicó.

Los grandes temas presentes en el disco también asoman sobre las tablas del escenario: la vida, los sueños y las realidades, el triunfo, el fracaso, el dolor, la muerte y el miedo.

En la relación entre el mundo del toro y el baile ya indagaron otros artistas de la talla de La Argentina, Antonio Canales o Antonio Gades. Ambas disciplinas giran en torno a uno de los conflictos esenciales (tanto del hombre como del toro), que es haber nacido para la muerte. La eterna oposición entre Eros y Tanatos, un combate dialéctico que en este montaje de Mercedes Ruiz se plantea como la lucha entre dos energías que son contrarias, pero también complementarias, puesto que la una existe por oposición o ausencia de la otra. Este aspecto existencial es el que pretende resaltar la dramaturgia creada por Francisco López, quien también asume la dirección escénica.

A juicio del director de escena, en la dramaturgia se ha intentado eliminar lo accesorio e incidir en “la idea de la esencialidad” que sobre el escenario se vislumbra, entre otras cosas, en el intercambio de papeles entre los personajes y las dos protagonistas.

La guitarra de Santiago Lara (que ejerce además de director musical y ha sido distinguido con el Giraldillo del Toque por su actuación en la pasada Bienal de Sevilla) estará acompañada  por Paco León como segunda guitarra, José Amosa en los teclados y Perico Navarro y Rafael Fontaina en las percusiones. Será el cantaor David Lagos quien ponga voz en las transiciones varios poemas de Miguel Hernández.