La Noche de la Saeta

El día eterno de la Semana Santa, que transita entre Jueves y Viernes Santo, tiene en la Noche de Jesús el epicentro a una jornada que los amantes de flamenco viven con muchísima intensidad. Si tienen la oportunidad de vivirlo, piérdanse por sus calles y busquen un rincón donde seguro puede aparecer un momento que guardará en su memoria por los siglos de los siglos.

Hoy no hay Santiago ni San Miguel, no hay Plazuela o Arrabal, no hay distinciones porque de un lado y del otro de la ciudad, se producirán momentos que, si tiene la suerte de poder vivirlos, tendrán en Jesús Nazareno o el Cristo de la Buena Muerte como seguros protagonistas.

No solo quedará ahí la cosa, nuestro recorrido saetero de hoy comienza en la Plaza de San Miguel a la una y media de la Noche de Jesús, cuando sale el Santo Crucifijo, donde solo rompe el silencio la voz de los saeteros que ponen broche a una espectacular salida procesional.

Más tarde, encaminaremos nuestros pasos a búsqueda de Jesús Nazareno, a su paso por calle Larga en Carrera Oficial y por Carpintería Baja y Larga de nuevo en su recorrido del vuelta, donde ya nuestros pasos serán quien nos guíe a una recogida del Cristo de la Buena Muerte por la calle Ancha donde, al igual que ayer, el Barrio de Santiago esperará el regreso de su cristo.

Cuando el sol despunta, la mañana se viste de Esperanza, de la Yedra, de la Plazuela y verla llegar a su templo es uno de los acontecimientos donde cualquier cosa puede pasar y donde la máxima expresión de fervor tendrá ya hilos de continuidad hasta la salida del Cristo de la Expiración cuando llegue la tarde.

David Montes
@Flamencomania