La ‘Buena Gente’ acoge la clausura del taller ‘Grandes Mujeres de mi Tierra: Flamenco y Literatura’

Organizado por la Asociación de Mujeres Artistas ‘La Roldana’, una entrevista a Patricia Moreno, un teatro por las alumnas del taller y un recital de cante de Lidia Hernández con Alba Espert a la guitarra pusieron epílogo a cuatro intensas jornadas dedicadas a Juana Vargas de las Heras ‘La Macarrona’.

Jerez, 5 de septiembre de 2020. La sede de la Peña Flamenca ‘Buena Gente’ de Jerez, en la Nave del Aceite, tuvo lugar en la noche de ayer la jornada de clausura del taller intensivo ‘Grandes Mujeres de mi Tierra: Flamenco y Literatura’ que, dedicado a la figura de Juana Vargas de las Heras ‘La Macarrona’, ha organizado la Asociación de Mujeres Artistas ‘La Roldana’.

Durante cuatro jornadas, las participantes del taller profundizaron en la sede de la entidad flamenca jerezana acerca de la relevancia e importancia que ha tenido la mujer en el mundo del flamenco en sus distintas vertientes como el cante, el toque o el baile, y ahondaron en el conocimiento de la repercusión que tuvieron en su momento figuras femeninas que han pasado a la historia del mundo de lo jondo como María Maya Heredia ‘La Andonda’, Pastora María Pavón Cruz ‘La Niña de los Peines’, Ana Amaya Molina ‘Aniya La Gitana’, Trinidad Camacho Carrillo ‘La Trini’ o la propia Juana Vargas de las Heras ‘La Macarrona’ a quien estaba dedicado el taller. 

Entrevista, teatro y recital de cante flamenco 

Tres han sido los contenidos que acogió esta jornada de epílogo de ‘Grandes Mujeres de mi Tierra: Flamenco y Literatura’ en la Nave del Aceite. En primer lugar, una entrevista por parte de Carmen Gutiérrez Montes a Patricia Noelia Moreno García, gestora cultural, filóloga, con estudios de posgrado en flamenco y miembro de la Cátedra de Flamencología de Jerez, en la que ambas desgranaron diferentes aspectos del impacto que tuvo la mujer en el flamenco del ayer y del que tiene en el de hoy.

Además, durante la entrevista se reivindicó que el flamenco, como expresión cultural que es, tuviera un mayor impacto en los programas docentes de los centros de enseñanza a todos los niveles, así como para reivindicar a una artista que este año cumple el 150 aniversario de su nacimiento.

Por su parte, tras la entrevista y como antesala del recital de cante flamenco programado como cierre, se dio paso a un teatro organizado por algunas de las participantes del taller en el que recordaron con pelos y señales la huella dejada por esas grandes mujeres flamencas que han sido objeto de trabajo durante las jornadas del curso impartido y sin las cuales no se concebiría el flamenco tal cual lo conocemos hoy.

Por último, como acto final el cante y el toque fueron los protagonistas. Flamenco con nombre de mujer en la voz de Lidia Hernández y en las manos de Alba Espert a la guitarra, quienes durante casi una hora ocuparon el escenario del salón de actos para ir dando vida a tonás, soleares, alegrías, tangos, fandangos y bulerías, cantes con los que se puso fin a un taller intensivo que bajo el nombre de ‘Grandes Mujeres de mi Tierra: Flamenco y Literatura’, acogió la Peña Flamenca ‘Buena Gente’, entidad flamenca siempre dispuesta a prestar su colaboración más altruista y desinteresada en causas tan loables como estas donde el flamenco es el protagonista, así como a proyectos singulares como este, que tienen por objeto dar visibilidad y poner en valor el importante papel de la mujer en el mundo del arte jondo.