Francisco Camas seguirá al frente del flamenco de Jerez

Francisco Camas volverá a ser el máximo responsable político en materia de cultura de Jerez y, por tanto, también de todo lo que tenga que ver con el flamenco en la ciudad. Así se ha dado conocer por parte de la propia alcaldesa, Mamen Sánchez, en la mañana de hoy, jornada en la que se han hecho públicas las designaciones de delegaciones, concejalías y tenencias de alcaldía para los cuatro próximos años.

Tenitente de Alcaldesa y Responsable del Área de Gobierno de Dinamización Cultural y Patrimonio Histórico es, exactamente, la denominación del cargo que ha recibido quien poco o nada ha realizado en pro de uno de los activos más importantes que tiene la ciudad como es el flamenco, salvo traspasar de fundación - o más bien de collar- al Teatro Villamarta y ni siquiera poner una piedra en lo que iba a ser el Museo Flamenco de Andalucía, por cierto, proyecto que se vendió en su día a bombo y platillo y que no sólo ha sufrido importantes modificaciones sino que, además, ha sido derogado por la Junta de Andalucía a la categoría de Centro de Interpretación en los últimos presupuestos.

Cuatro años tiene de nuevo por delante el recién nombrado delegado, de quien algunos esperamos que tenga tiempo en este mandato para instar a sus técnicos a que promuevan el arte de lo jondo en la ciudad. Y no sería mala idea que lo hiciera, si nos acepta el consejo, a través de un núcleo fundamental para el mismo como son las peñas flamencas. Si. Esas entidades que se tienen que buscar contínuamente la vida porque, salvo contadas contrataciones a dedo realizadas por la delegación cultural, no han recibido más ayuda en estos últimos cuatros años que el convenio que dejó firmado la Federación Local de Peñas Flamencas con el consistorio jerezano en el bajo el mandato de la popular María José García Pelayo en mayo del año 2015.

No estaría de más que, ahora que tiene cuatro años más por delante, usara a las entidades flamencas jerezanas - o incluso hasta su federación- para algo más que salir en las fotos de programaciones en las que poco o nada tiene que ver el Ayuntamiento de Jerez porque son gestiones privadas y, además, dejara de usarlas para apagar fuegos que no tenían extintor, como el que tuvieron que apagar el año pasado cuando no se presentó ningún promotor a la licitación para organizar los Viernes Flamencos y fueron estas la que sacaron de la quema uno de los ciclos de medio formato más longevos de Andalucía.

Jerez no es un lugar donde haya primado el despotismo flamenco que ahora reina e impera. Si. Eso de todo para el flamenco pero sin el flamenco. ¿Lo recuerdan?. Ya lo dejamos escrito en su día. Esperemos no tener que volver a repetirlo porque eso no sería ni buena señal ni lo que sería deseable para una ciudad que tiene todos los elementos para ser capital, epicentro y vértice de un genoma cultural al que, desde hace ya algún tiempo, le sobran manos indeseables meciendo la jondura.